OPINIÓN
Ali (III)
Pasaban los días y Sayf seguía sin comprender la templanza de su amigo Alí que parecía insensible al ardor religioso que corresponde según él a un auténtico musulmán.
- …Pero saib Alí, los infieles están equivocados, su vida de perdición e infidelidad es opuesta a la que nos dice el Profeta Mahoma
- Te sorprenderás Sayf que nuestro primer profeta, fue también el de los judíos y el de los cristianos que ellos llaman Abraham. Verás…
El joven Sayf acomodándose en el suelo, alzó ávido el rostro atento como un niño a la historia que Alí se disponía a ofrecerle
- El profeta Ibrahim, o Abraham, como le llaman los hermanos cristianos fue considerado por Aquel dios, que es también el tuyo y el mío, como el único hombre justo, y por mandato divino, para conservar su Anif (pureza), dejó Caldea y se instaló en el país de Canaá, lo que son hoy Israel y Palestina, tierra generosa en que aquel profeta prosperó en la paz de Dios.
- Cuesta creer que en aquella tierra algún día hubo paz – Interrumpió Sayf-
- Desde Noé, diez generaciones después del Diluvio, cuando Ibrahim contaba con 86 años, dio por estéril a su mujer Sara y tomó como concubina a su esclava egipcia Agar, con quien tuvo al hijo que llamaron Ismael. Por eso el primer libro de los cristianos, el Génesis (21:18), dice Dios “del hijo de la sierva haré un gran pueblo”
Pasaron catorce años y aquel dios de Abraham, fiel a Su promesa, cuando este ya contaba con 100 años, concedió a Sara la gracia de dar a su matrimonio, el fruto más deseado de sus vidas: Un hijo al que llamaron Isaac. A los pocos años, para probar Dios su lealtad mandó a Abraham, sacrificarlo, pero en el último momento, un ángel detuvo su mano y su incondicional obediencia, quedó sobradamente probada.
Isaac con sus hijos Esaú y Jacob continuó la línea dinástica de muchas generaciones hasta José de Nazaret, padre adoptivo de Jesucristo y marido de María, que en la sura 3 de nuestro Corán la reconocemos virgen .
- ¿Quieres decir que fue Dios quien eligió el tronco que nos une a musulmanes judíos y cristianos?.
- Si, tenemos mucho en común, compartimos los diez mandamientos y prácticamente todo su Antiguo Testamento, la limosna, el ayuno…
- ¿Y qué pasó con Ismael?
- Ismael aparte de los 12 hijos príncipes, tuvo además una hija, que fue esposa de Esaú, hijo de su hermanastro Isaac. sus descendientes fueron llamados ismaelitas que se asentaron entre Egipto y el golfo Pérsico; fueron la cuna del pueblo islámico que somos ahora –añadió Alí – Ismael fue descendiente del profeta Mahoma y colaboró en la construcción de La Meca
- Si de Abraham nacieron dos naciones, es estúpido tanta hostilidad y desprecio hacia nuestras diferencias.
- Tú mismo te has contestado. Cuando un individuo o una cultura se cierra arrogante a lo que piensan otros, sólo ve lo bien que lo hace él o ella y lo mal que lo hacen los demás. Ese es el origen de tanta hostilidad. En cambio, aunque la forma de pensar sea muy diferente, si se coopera en el bien común, siempre se suavizan las diferencias y reina la paz. ¿Me entiendes ahora?.
La Luz de la verdad brillaba en los ojos de Sayf en la penumbra del anochecer, mientras Alí le tendía la mano para ayudarle a ponerse en pie y retornar a sus casas.
Abraham murió acompañado de sus dos hijos. Ismael llevó a su pueblo hacia el Islam, Isaac condujo a su descendencia hasta el mismo Hijo de Dios hecho hombre, que un año más nace entre nosotros en la felicidad de nuestros hogares y unidos por encima de toda diferencia. Tal vez porque albergamos un poco de ese Abraham de bondad y confianza que nos sitúa tan cerca de Dios.