Tengo un partido político para usted

Pronto tendremos la Feria de los Partidos, una más. Mis vecinos tienen que hacer uso de la democracia y confiar su voto a partir de un lema, por ejemplo, "Somos", "A tu lado"... En Latinoamérica son más explícitos, "Estamos mal, pero vamos bien" (1991) de Carlos Menen en Argentina, 30 años después podrían utilizar otro, "Estamos peor, pero vamos bien" y, adaptado a España, propondría uno para el PSOE "Unidos, mejor que revueltos".

La política es lo que hacen los políticos. Una tautología no necesita demostración. Algo bien diferente es considerar la naturaleza de los políticos, esto es, preguntarse por la metafísica que trata del ser en general y de sus propiedades trascendentales y así tenemos a los denominados "Paracaidistas" políticos que caen del cielo y aparecen en mitad del pueblo, como Pérez Viú, otros pueden ser denominados "Insurgentes" como Martín Galán que de la nada ha logrado hacer nada.

Ahora tenemos la posibilidad de nuevas conjeturas, como los "Inmobiliarios", que tendrán que lidiar con los clásicos: "Uniditos", "Ombliguistas" y "Diccionarios". Aún estamos a tiempo de ver partidos censitarios del siglo XIX, por ejemplo, si los habitantes de El Bosque votan en masa pueden lograr 5 concejales y hacerse con la alcaldía según propone una revista local, de manera que tendríamos el partido de los "Bosquimanos". Trasladada esta idea al futuro, cuando los nuevos habitantes de El Monte de la Villa vivan en sus pareados, podrían formar un nuevo partido, el de los "Montevillanos".

Los partidos se parecen a las tribus, sus miembros tienen conductas similares, montan carpas, reparten pasquines, regalan bolis, visten camisetas con el logo, realizan cánticos y pasean en coches con carteles haciendo sonar sus bocinas. Es parte del carnaval electoral.

Para el ciudadano de a pié, tal despliegue le deja atontado, le ponen cebos y pican como las merluzas de pincho, otros son arrastrados por las redes ideológicas y la mayoría, me incluyo no quiero ser una excepción, somos pescados, seamos arenques, lubinas o meros electores.

Sin embargo, ya viejo, harto de haber sido sistemáticamente engañado me fío más de lo próximo, de los conocidos, de las personas que tienen sus ocupaciones, que se ganan la vida con sus trabajos y que llegan a la política para gestionar lo público de forma responsable, que pueden ser honradas porque tienen su profesión a la cual pueden volver sin más y en todo momento. Se necesitan profesionales, ni ideólogos, personas con imaginación para resolver lo cotidiano y preveer el futuro, capaces ver las oportunidades para el desarrollo de nuestro municipio y no sus oportunidades para escalar políticamente.

Quien confunde valor y precio, es un necio y hay muchos partidos "Hipócritas" llenos de "Falsarios" que simulan un comportamiento y unos valores que no poseen. Los villaodonenses queremos HECHOS realizados por "Hacedores" que huyendo de lo transitorio logren alcanzar lo permanente en sus obras. Necesitamos construir futuro para enjuiciar la destrucción que ha significado el pasado político de nuestra población. Tenemos en la palma de nuestras manos dejar de quejarnos •