CARTAS AL DIRECTOR
Carta de Pilar Martínez a los villaodonenses
Mis queridos villaodonenses, mi gran familia, he renunciado al acta como concejal de Villaviciosa y al Partido Popular. Estoy muy orgullosa de haber pertenecido a este partido. Estoy orgullosa de haber sido representante de los ciudadanos en candidaturas de este partido y de haber formado parte de equipos de gobierno que impulsaron proyectos políticos regeneradores y reformistas, que han contribuido de forma decisiva al bienestar de los ciudadanos. Ese Partido Popular de afiliados entusiastas, comprometidos con el bien común, de dirigentes y gobernantes honestos y competentes, lo tengo grabado en la memoria. De ese Partido Popular nunca me daré de baja y lo llevaré siempre en mi corazón.
Con el afán por cambiar las cosas que me duelen decidí luchar por la regeneración de mi partido allí donde lo tenía más cerca: en Villaviciosa de Odón. Concurrí a las primarias con un programa que intentaba demostrar que otra forma de hacer política era posible. El proyecto que encabecé ganó las elecciones primarias con una notabilísima participación de los afiliados, derrotando electoralmente a la vieja política. Pero la vieja política, la de las redes de intereses incrustados en el partido, no acepta derrotas y promovió, como saben, una candidatura independiente
Con el mismo proyecto regeneracionista con el que gané las primarias encabecé las listas del partido, ganando las elecciones municipales. Y lo logramos en condiciones muy difíciles: un Partido Popular en declive ante los villaodonenses precisamente por la pésima gestión de quienes perdieron las primarias; la candidatura independiente promovida por estos mismos que nos restó unos votos decisivos y el declive del partido a nivel nacional y regional por los casos de corrupción que la vieja forma de hacer política había hecho proliferar. A ello se unió una campaña durísima de Vox contra mi persona, recurriendo a las peores prácticas autoritarias, incluido el libelo y la difamación. En estas condiciones fue un milagro que el proyecto que lideraba ganara las elecciones, pero las ganamos.
Como les decía, la vieja forma de hacer política y los intereses que la impulsan no aceptan derrotas. Pronto empezaron a maniobrar: Vox incumplió los pactos con el Partido Popular y pidió explícitamente mi cabeza como una suerte de vendetta por el freno que puse a las prácticas urbanísticas ilegales de Espinosa de los Monteros y Monasterio durante mi etapa como concejal de urbanismo en Madrid. Se entregó el gobierno del municipio a un alcalde con el 13% de los votos, algo verdaderamente incomprensible, dando la gestión del urbanismo a Joaquín Navarro y con ello a los intereses que le sirven de apoyo, que le organizaron su candidatura y que urdieron el actual e ingobernable gobierno municipal. Los mismos intereses que están impulsando proyectos urbanísticos a los que todos debemos prestar especial atención. Finalmente, desde la dirección regional del Partido Popular se impuso, sin justificación y explicación alguna, una gestora para que me desplazara de la dirección del partido y que entregó el poder a quienes perdieron las elecciones primarias e hicieron campaña con Navarro en contra de nuestro partido.
Lo que ha sucedido en Villaviciosa puede resultar incomprensible para cualquier ciudadano y solo es explicable por la penetración en la política de intereses privados de carácter urbanístico. El último escándalo urbanístico fraguado por esa vieja política en nuestro municipio ya está apareciendo a través de la operación del centro de formación deportiva en el Bosque, he informado de todo lo que conozco a la Fiscalía Anticorrupción para que lo investigue.
Presento mi renuncia como concejal porque las fuerzas ya no me dan para más. Yo puedo luchar contra esos intereses, lo he hecho toda mi vida, pero necesito el apoyo de mi partido. En el pasado lo tuve pero entonces era un partido reformista, centrado y regeneracionista. Hoy es un partido penetrado por redes de intereses ajenos a la política que, mediante usos políticos autoritarios como los que estamos viviendo en Villaviciosa de Odón, dan rienda suelta a que proliferen casos que luego terminarán por avergonzar nuevamente a nuestros afiliados y votantes.
La determinación de renunciar al acta de concejal ha sido una decisión muy dolorosa, a cuantos han confiado en mí solo puedo expresarles mi agradecimiento y decirles que lo he intentado, que he luchado por ello con todas mis fuerzas. Tendrán que ser otros los que tomen el relevo del regeneracionismo. Tendrán que ser otros, como la joven Pilar Martínez que se opuso al Pocero en nuestro municipio o la experimentada Pilar Martínez que se opuso a gentes como Espinosa de los Monteros en la ciudad de Madrid, personas comprometidas, honestas y entregadas al bien común, que tomen la bandera de la regeneración.
Muchas gracias siempre tendrán mi afecto siempre seréis mi gran familia, la que llevo en el corazón.
Fdo.:Pilar Martínez López